Este método revolucionario de extracción de tinta fue desarrollado para eliminar tatuajes de forma rápida, fácil y permanente. El uso de este método tiene muchos beneficios en comparación con otros métodos de eliminación de tatuajes. El tratamiento de eliminación de tatuajes es menos doloroso y más rápido que otros métodos de tratamiento. En muchos casos, este tratamiento es más efectivo que el láser y requiere menos sesiones para obtener resultados satisfactorios. El cuidado posterior es simple y solo requiere que los pacientes sigan un breve conjunto de instrucciones.

Como paciente, usted tiene derecho a recibir información sobre su tratamiento para que pueda tomar la decisión de proceder o no con la eliminación de tatuajes con láser después de conocer los riesgos involucrados. Esta divulgación es para ayudar a informarle antes de su consentimiento para el tratamiento sobre los riesgos, efectos secundarios y posibles complicaciones relacionadas con la eliminación del tatuaje con láser.

Los posibles riesgos del procedimiento incluyen, pero no se limitan a dolor, púrpura, hinchazón, enrojecimiento, hematomas, ampollas, formación de costras / costras, vellos encarnados, infección y complicaciones imprevistas que pueden durar hasta varios meses, años o de manera permanente.

Existe un riesgo de cicatrización: los efectos a corto plazo pueden incluir enrojecimiento, ardor leve, moretones temporales o formación de ampollas. Puede ocurrir un oscurecimiento de la piel de color marrón / rojo (conocido como hiperpigmentación) o un aclaramiento de la piel (conocido como hipopigmentación). Esto generalmente se resuelve en semanas, pero puede tomar hasta 3-6 meses para sanar. El cambio de color permanente es un riesgo poco frecuente. Pérdida de pecas o lesiones pigmentadas puede ocurrir. Los cambios textuales y / o de color en la piel pueden ocurrir y pueden ser permanentes. Muchos de los tatuajes cosméticos y tatuajes corporales están hechos con pigmentos de óxido de hierro. El óxido de hierro puede volverse marrón rojizo o negro. El óxido de titanio y otros pigmentos también pueden volverse negros. Este color negro u oscuro puede no ser removible. Debido al blanqueamiento inmediato del área tratada expuesta por el láser, puede haber un oscurecimiento temporal de la tinta, lo que puede hacer que sea difícil o imposible notar un cambio de color específico del proceso de eliminación del tatuaje.

Infección: aunque la infección después del tratamiento es inusual, pueden ocurrir infecciones bacterianas, fúngicas y virales. Las infecciones por el virus del herpes simple alrededor de la boca pueden ocurrir después de un tratamiento. Esto se aplica tanto a las personas con antecedentes de infecciones por el virus del herpes simple como a las personas sin historial conocido de infecciones por el virus del herpes simple en el área de la boca. En caso de que se produzca algún tipo de infección en la piel, es posible que se necesiten tratamientos adicionales o antibióticos médicos.

Reacciones alérgicas: Se han recibido informes de hipersensibilidad a varios pigmentos del tatuaje durante el proceso de eliminación del tatuaje, especialmente si el pigmento del tatuaje contenía mercurio, cobalto o cromo. Tras la diseminación, los pigmentos pueden inducir una reacción alérgica grave que puede ocurrir con cada tratamiento sucesivo. En algunos pacientes se observa erosiones superficiales, hematomas, ampollas, milia, enrojecimiento e hinchazón que pueden durar hasta varios meses, años o permanentemente.

El cumplimiento de las pautas postratamiento es crucial para la curación, la prevención de cicatrices y la hiperpigmentación. Las pautas para el cuidado posterior incluyen evitar el sol durante 2 meses después del procedimiento. Si es necesario estar al sol, se debe usar un protector solar con SPF 25 o superior.